Zero no Shalltear, Capitulo 2

Capítulo 2

Conmoción, ese era el sentimiento general que sentían cada una de las personas reunidas en ese momento. Ya sean estudiantes, familiares, el profesor y la misma Louise se sentían como si estuvieran soñando, porque esto había sido demasiado irreal para ser cierto. 

El día se había convertido en noche, una tormenta había aparecido casi destruyendo la academia a  su paso y por si fuera poco después de que todo regresara a la normalidad, una figura fuera de este mundo estaba de pie justo enfrente de Louise quien hasta hace poco había intentado por docenas de veces llamar a su familiar. 

«¿De verdad había tenido éxito?» Fue el pensamiento colectivo de todos.

«¿Sera esto producto de una actuación muy planificada?» Se cuestionaron la mayoría que no pensaba que la Zero había tenido éxito. 

No sería tan descabellado. Los Valliere eran la familia más poderosa después de la familia real y la madre de Louise, el viento pesado, era famosa por su poder sobre el viento. 

De hecho, pensándolo más detenidamente era muy probable o más bien, era más creíble pensar que todo había sido un montaje para proteger la reputación de la tercera hija Valliere que era bien sabido por todos no era más que un fracaso. 

—Típico de los Valliere. Tenían que hacer todo un espectáculo y esperar que fuéramos tan tontos como para creer esto. 

Después de escuchar ese comentario, para la mayoría de los estudiantes ahí reunidos estaba claro que la Zero había montado un espectáculo para sorprenderlos y fingir que ahora era una maga. 

Esto molestó a la mayoría y los gritos de indignación comenzaron a llover sobre Louise quien aun sin prestarles atención miraba con total sorpresa la figura delante de ella. 

El profesor Colbert molesto por los comentarios de sus estudiantes no pudo defender a la señorita Louise ya que la curiosidad del evento de invocación pesaba más para él y ahora quería saber qué tipo de familiar había invocado la señorita Valliere. 

Louise por su parte, estaba experimentando tantas cosas a la vez que no sabía cómo reaccionar. Su cuerpo se sentía pesado y sabía que si no mantenía la concentración su cuerpo caerá rendido al suelo. Y no solo era eso. se sentía sucia por todo el polvo en su cuerpo, se sentía indigna por el estado de su ropa que parecía más el de un salvaje que el de una noble. pero lo que prevaleció por encima de todo era sorpresa y más que nada felicidad. 

La alegría que sentía en ese momento fue suficiente como para borrar todas las otras sensaciones. Este no era el momento para descansar, este era el momento para celebrar. 

Ella lo merecía. 

sintiendo como una sonrisa estúpida se formaba y se negaba a salir de su rostro, Louise dio saltos de victoria y gritó.

— ¡LO HICEEEEEEEE!

a todo pulmón, lo que la dejó con la garganta dolorida y sin respiración. pero era algo que tenía que sacar de su sistema. Era algo que necesitaba hacer. 

Louise quería bailar. quería volar, aunque aún no podía hacerlo. 

Louise quería besar a alguien, aunque por suerte para su futuro yo, no había habido nadie en ese momento junto a ella, salvo su inmóvil familiar que aún no había reaccionado en absoluto. 

Louise se sentía tan feliz que ni siquiera registró las innumerables voces que se dirigían a ella en busca de respuestas. 

Louise solo quería saborear este momento. Recordar su triunfo. ya que en este momento mucha de la confianza e inseguridad que había perdido comenzaron a llenarse mágicamente como si todo solo hubiese sido una pesadilla y ella solo estaba despertando en este momento. 

Louise no sabía cuánto tiempo estuvo así en ese estado de felicidad pura. pero después de comenzar a bailar y a girar sobre sí misma una y otra vez, golpeó un obstáculo que le recordó la realidad y sobre todo a su familiar que aún estaba inmóvil. 

«Esto aún no termina, eh»

No lo estaba. Ella aun debía sellar el contrato con su familiar. 

Poniendo al fin sus pensamientos en orden, Louise se avergonzó de lo excéntrica que debió haber parecido hace unos momentos, pero luego lo descarto. Ella ya había pasado por el infierno siendo la marginada de la clase. hacer un par de actos vergonzosos no la hundirá más ya que ella estaba en el fondo. Ahora lo único que podía hacer era subir. 

Y algo dentro suyo le dijo que subir será divertido. 

Volviendo a lo que de verdad importaba, Louise al fin concentró todo su ser en su familiar. 

Ella la había visto, sí. Pero no la había visto de verdad. Solo el saber que había alguien ahí era suficiente. pero ahora que realmente detallaba sus características, Louise se sorprendió por la clase de familiar que había invocado. 

— ¿una muñeca?

eso parecía ser. 

la figura era la de una jovencita de su misma estatura, lo que la hacía baja, casi una niña. casi. 

Su cabello era de color plateado, aunque bajo cierta luz se volvía rosado, lo que le daba un parecido extraño a sí misma. Sus ojos color escarlata miraban a la nada y su cara de porcelana era imposible para un humano por muy noble que sea. Sus ropas eran elegantes y su aura de belleza eran demasiadas perfectas para una criatura viviente. 

es así como Louise concluyó que su familiar era una muñeca. O para ser más precisos un golem con una apariencia muy bonita. 

Sus compañeros por otra parte ya sean hombres o mujeres después de haberse aburrido de que la Louise la Zero los ignorase, pasaron su atención a la supuesta familiar y quedaron totalmente sorprendidos de la belleza que desprendía. 

Si no fuese porque estaban seguros de que todo esto era un acto, sin duda alguna se estarían revolcando de la envidia en este momento. 

El pensamiento de la mayoría de los jóvenes presentes era el de que se asegurarían de conseguir los datos de esa actriz para ponerla bajo sus servicios. 

una oleada de risas pervertidas se formó en sincronía por la cara de la mitad de la clase, haciendo que las jóvenes ahí presentes fruncieran el ceño y se sintieran antipáticas. 

El profesor Colbert por su parte, no le importaba la apariencia de la familiar en sí, solo estaba sorprendido del aura de poder que desprendía la criatura. De hecho, estaba sorprendido que nadie más lo notara ya que un aura rojiza se veía sutilmente desde su figura. Lo más raro era que estaba inmóvil, como si estuviese esperando que alguien interactuara con ella. Eso era raro para un golem. Normalmente tomarían una actitud servicial o se pondrían firmes a la espera de órdenes. «Quizás es un modelo especial», concluyó el profesor

«Solo espero no sea peligrosa», suspiro el profesor quien finalmente habló para dar por terminada la ceremonia que había tomado mucho más tiempo del que había supuesto.

—Señorita Valliere. Por Favor termine el contrato. Debemos terminar esto. Le ruego se apresure. 

Louise que fue sorprendida por el aviso del profesor, solo pudo asentir en señal de confirmación. 

El hechizo de sellado no era complicado. pero para Louise cuyo historial de éxito era de solo uno, se sintió más difícil. fallar ahora sería inadmisible.

«De ninguna manera seré una Zero de nuevo»

«Este es el comienzo de una nueva yo. así que ánimos Louise. ¡puedes hacerlo!» se animó a sí misma. 

Con pasos cautelosos, Louise se acercó justo enfrente de su familiar. Su hermosa cara le pareció el ejemplar perfecto para dar su primer beso. Aunque por supuesto no lo haría. El hechizo sólo exigía un beso como formalidad. Podía ser dado en cualquier parte del cuerpo del familiar invocado

— mi nombre es Louise Francoise Le Bla……., no. Para ti es solo Louise

—Pentágono de los cinco poderes elementales…… y con todo el corazón y mi alma.

—bendigan a este ser humil……..a esta mi compañera y háganla mi familiar.

Louise procedió a sellar el contrato con un beso casto en la frente de su familiar. 

Su familiar aún seguía sin reaccionar, como si su mente aún no estuviese en este mundo. 

Louise estaba a la espera. No sabía que el contrato había sido sellado hasta que aparecieron runas en la mano izquierda de su familiar. 

parecían ser dolorosas ya que quemaron la inmaculada piel de su familiar, pero ella ni se inmuto ante el dolor. 

Louise feliz de que el hechizo terminó bien, pero algo ansiosa porque su familiar aún no daba signos de vida se acercó preocupada y trato de tocarla para ver como reaccionaba. 

sin embargo la respuesta que consiguió fue más de la que esperaba. 

—hahahaha, Louise-sama, me está haciendo cosquillas. 

Hablo la chica, como si esto fuese una rutina.

Louise abrió los ojos como platos y se detuvo un par de segundos a digerir la voz que había escuchado. 

Era de su familiar sin duda alguna. No parecía la voz de un golem, ya que muy pocos de ellos usan voz para empezar y los pocos que venían equipados con esa habilidad tenían una voz robótica y neutra. 

pero esta voz era diferente. Era relajante y suave al oído. Era cautivadora y elegante a la vez. 

Louise quedó maravillada por su familiar. Con una sonrisa en su cara, ella recordó que estaba tocando el cuerpo de su familiar y dando un paso hacia atrás, para tristeza de la jovencita de cabello plateado, Louise al fin decidió presentarse formalmente. 

—Hola

Solo pudo sacar de su boca. había mucho que decir. quería agradecerle por responder a su llamado. quería contarle toda su travesía. quería saludarla y darle una buena primera impresión. pero de su boca solo salió esa palabra, ya que se sentía natural, como si no fuesen desconocidas. Como si estuviese bien ser tan informales. Como si fueran viejas amigas desde hace milenios y este era su reencuentro. 

—Louise-sama. Es un gusto conocerla. 

Louise se sorprendió. así que esa sensación de familiaridad era solo eso, una ilusión. tenían que conocerse primero. 

—….el gusto es mío. Mi nombre es Louise, pero parece que ya lo sabías. 

sonrió la pelirosa algo avergonzada de su falta de modales. había estado tan sola estos últimos meses que había olvidado la etiqueta correspondiente para este tipo de eventos. Aunque pensándolo mejor, ¿hacía falta ser tan formal?  ella era su familiar después de todo. No quería tratarla como una extraña. quería tratarla como algo importante. decidiéndose por ese pensamiento, Louise lanzó sus modales hacia la papelera en algún rincón de su mente y su postura se hizo más relajada. 

— Y tu nombre es?

los ojos de su familiar se vieron sorprendidos como si hubiese hecho una pregunta extraña, a pesar de que era lo normal cuando dos personas se conocían por primera vez.

—Shalltear Bloodfallen, Louise-sama. 

Louise registro ese nombre y lo guardo permanentemente en su memoria. Era un buen nombre. casi como el de un noble. 

Louise no pudo evitar comparar a su familiar con un humano. Era cierto que ella era demasiado perfecta para serlo, pero aun así, no había signos de que fuese algo artificial. o alguna otra criatura humanoide. parte de si estaba insegura de sentir repulsión ante la idea de haber invocado a una plebeya, pero después de pensarlo un poco, esas preocupaciones se evaporaron para no dejar ningún rastro de duda en su mente. 

Shalltear era su familiar. A Louise no debería importarle qué tipo de especie era. Ella estaba aquí por Louise. no necesitaba nada más. Tenían toda una vida para conocerse más a fondo. 

—Bien Shalltear, ¿te parece bien si nos vamos a mi habitación?

Louise tardó en registrar lo que decía. casi se escuchaba indecente y la cara sonrojada de Shalltear solo empeoraba la situación.

—Estaría encantada Louise-sama. Respondió vergonzosamente Shalltear. 

Louise solo pudo taparse la cara con una mano decepcionada de su falta de tacto, pero aun así solo basto un par de segundos para agitar el sentimiento y tomar de la mano a Shalltear. 

—vamos, por aquí. 

Shalltear no se negó y al contrario parecía muy complacida de ser tocada por Louise. 

esta atmósfera mágica se rompió justo cuando ambas quisieron dar un par de pasos y recordar que no estaban solas en el lugar. 

un profesor encantado con las runas de su familiar y una turba de adolescentes enfurecidos la saludaron con obvia curiosidad y disgusto.

—¿A donde crees que vas Zero? ¿acaso crees que somos estúpidos como tú y nos vamos a creer que todo eso fue real?

—cuanto te pago chica. Yo triplicare tu tarifa.

—¿Zero estas demente? ¿es que acaso querías matarnos hace un rato?

—esto no se quedará así Zero. Ensucie mi capa nueva y vas a pagar por ella. 

para Louise esto fue como si un balde de agua fría se derramara sobre ella. Ahora estaba de vuelta en el mundo real. en una realidad donde ella estaba en el fondo de todo. 

deteniendo su paso, Louise solo pudo bajar su cabeza y mirar hacia el piso, sin saber qué responder. 

Quería negar la acusación sobre su familiar, ¿pero acaso ellos escucharían?

Louise pensó que después de invocar a su familiar, su trato de marginada en la clase podría cambiar para mejor, pero la realidad le recordó lo cruel que es este mundo. 

«nada va a cambiar esperando lo mejor de los demás. Si quieres que te traten diferente, tienes que hacerlo por ti misma». Concluyó Louise tristemente.

Esos pensamientos pasaron por la cabeza de Louise. le molestaba la actitud de sus compañeros, pero la molestaba más su cobardía. No quería parecer débil ante Shalltear. pero aun así, ninguna sílaba en forma de respuesta salió de sus labios. Solo silencio. Sin embargo, para sorpresa de Louise, Shalltear no tenía esas cadenas. 

—¿A quién crees que estás hablando, sucia bolsa de carne?

Shalltear lo dijo con tanto disgusto que de inmediato las voces de acusación se detuvieron y quedaron sorprendidos ante las palabras. De alguna manera habían sido insultados como basura por una simple plebeya. 

— Quien te crees que eres plebeya. Acaso crees que, por estar bajo el servicio de los Valliere, tienes el derec…….

Todo pasó en solo un segundo. Shalltear ni siquiera dio señales de moverse. Sin embargo, la cara sorprendida del joven estudiante que había insultado a Louise y a Shalltear ahora solo estaba conmocionada por la falta del brazo que había señalado hacia ellas. 

el brazo en sí, había sido cortado tan limpiamente que nadie lo noto hasta que el grito del joven desdichado los dejo a todos con los tímpanos destrozados.

—¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!............AHHHHHHHHHH!

el ahora amputado estudiante lloro y se revolcó en el suelo gimiendo de dolor. 

La cara de cada estudiante presente se volvió pálida por la conmoción. Nadie sabía cómo había pasado esto. ¿quizás la familiar de la Zero había hecho algo? o ¿era parte del acto? o ¿quizás alguien más los estaba atacando?

el consenso general de la clase fue acusar y luego pensar. Lamentablemente había alguien que no estaba dispuesta a recibir insultos de unos sucios humanos. 

— Tu, familiar de la Zero. le hiciste algo a ………

y justo como había pasado hace tan solo unos segundos, otro estudiante cayó revolcándose del dolor esta vez con una pierna faltante. 

la sangre acumulada de ambos cuerpos comenzó a percibirse en el aire alrededor y la seguridad de que todo era culpa de la figura al lado de Louise ahora tomaba peso en los pensamientos de los insensatos. 

—¡CORRAN….!

— Pueden correr todo lo que quieran, pero mis lobos los encontraran y jugaran con sus restos. Sonrió Shalltear feliz de estar defendiendo el honor de su nueva ama. 

—vayan mis familiares, cómanselos a todos. Demandó Shalltear a decenas de sombras que surgieron de la nada en forma de lobo y listos para atacar. 

Al instante el profesor Colbert lamentándose no haber reaccionado más rápido, se movió como un veterano de guerra y con una llama en forma de serpiente, se lanzó contra los lobos que comenzaron a rodear a los niños que corrían por su vida. 

al lado de la serpiente de fuego, un dragón junto a la pequeña forma de una niña de pelo azul y una salamandra de fuego junto a una voluptuosa pelirroja se sumaron para combatir contra los lobos que amenazan con comérselos vivos si no hacían nada para detenerlos. 

los lobos como si estuvieran entrenados para enfrentar este tipo de reacción se movieron con velocidad y se organizaron en grupos de 3 para lanzar ataques simultáneos desde todo ángulo. 

una batalla campal estaba punto de empezar y una masacre estaba casi a punto de cometerse, pero un grito en medio de todos, desvió la atención de los combatientes a la chica pelirosa que lloraba en el piso. 

—por favor para…... por favor Shalltear, para. Rogo Louise que no sabía cómo detener la situación, más que con palabras de súplica. 

Shalltear por su parte, estaba pálida y sorprendida. No sabía que había hecho mal, pero ver a su ama así de abatida, le partió el corazón y solo pudo asentir para aliviar el dolor de su maestra. 

—Por supuesto Louise-sama. 

y con solo esas palabras, los lobos volvieron a las sombras donde desaparecieron sin dejar rastro de su existencia. El profesor Colbert, junto a Tabitha y Kirche miraron con precaución a las dos chicas. 

Louise por su parte, estaba cansada. 

Todo esto parecía un sueño. una pesadilla. Su cuerpo estaba al borde de desmayarse y la confusión en su cabeza solo la animaban a dejarse caer en el piso. Sin embargo, antes que nada, Louise tenía que estar segura de que su familiar no matara a nadie accidentalmente. 

—Shalltear por favor. Te lo pido. si eres mi familiar. te voy a dar una única orden y nada más. Si después de esto aún deseas estar conmigo estaré feliz de que así sea porque quiero que seas mi compañera. quieres ser mi amiga Shalltear? 

Louise pregunto esperanzada con los ojos a punto de cerrarse por el agotamiento. 

Shalltear por otro lado, estaba confundida. Ella tenía una nueva ama. Una que la había salvado. y una que le estaba ofreciendo su amistad. Shalltear sabía que ella era ahora su familiar. así que debería hacer todo lo que se le ordene. ser tratada como amiga era más de lo que podía comprender. Pero aun así, Shalltear en el fondo deseaba poder estar más cerca de su ama. si el camino era comenzando siendo su amiga, en vez de ser una muñeca que cumplía todas sus órdenes, Shalltear estaba feliz de aceptar. 

— si Louise-sama. No merezco una posición tan importante, pero si no le molesta, me encantaría ser su amiga. Solo quiero que no me abandone por favor.

Shalltear sonrió tan deslumbrantemente que Louise casi había olvidado la masacre que había estado a punto de suceder. Casi. 

—Nunca te abandonaré Shalltear, pero debes prométemelo. esta es mi única orden como tu maestra. Este es nuestro pacto real. Un pacto de iguales. No quiero que mates Shalltear y a cambio jamás te abandonare.

Shalltear trago saliva. no le importaba seguir cualquier orden que Louise-sama le diera. pero seguir esa orden haría muy difícil protegerla de esas bolsas de carne. 

sin embargo tras ver la mirada seria y llena de lágrimas de su ama, y después de prometerle que nunca la abandonaría, Shalltear sólo pudo enderezar su expresión y darle su cara más confiable. 

—Lo prometo Louise-sama. 

Louise solo sonrió y con esta confirmación se dejó caer a los brazos de Shalltear que la recogió con delicadeza, dejándola descansar junto a ella. 

Shalltear estaba feliz de ver a su salvadora. Era hermosa y era su amiga. Limpiando la suciedad de la cara dormida de Louise con un pañuelo que salió de la nada, Shalltear se recostó sobre el piso y abrazo con mucho cuidado a Louise, acercándola sobre sí misma y cantándole canciones de cuna para desearle buenos sueños. 

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